Por Laura Tamia Ortiz Chaves.

El Foro Económico Mundial publicó la semana pasada el Informe de Riesgos Globales 2023 (en). Este documento toma como referencia los resultados de la Encuesta Global de Percepción de Riesgos (GRPS) y da una visión de la percepción sobre los riegos a los que se enfrenta o se puede enfrentar la sociedad. En ella, participaron más de 1200 expertos académicos, empresarios, comunidad internacional y sociedad civil de 121 países que fueron consultados sobre el “riesgo global”.

¿Qué es el riesgo global?

A efectos del informe, se entiende como “la posibilidad de ocurrencia de un acontecimiento o condición que, de producirse, afectaría negativamente a una proporción significativa del PIB, la población o los recursos naturales”.

Cómo se mide la percepción de riesgo global

La Encuesta Global de Percepción de Riesgos incluye 32 factores políticos, sociales, económicos, tecnológicos y medioambientales, que se miden a partir de los siguientes componentes:

• Perspectiva: invitaba a los encuestados a predecir la volatilidad mundial para contextualizar la evolución del panorama mundial de riesgos.
• La gravedad: evaluaba el impacto probable percibido de los riesgos mundiales en un horizonte de uno, dos y diez años, para ilustrar la evolución riesgos globales individuales a lo largo del tiempo.
• Consecuencias: medía las posibles repercusiones de la aparición de un riesgo, para poner de relieve las relaciones entre los riesgos globales y el potencial de agravamiento de las crisis.
• Preparación ante los riesgos y gobernanza: invitó a los encuestados a evaluar la eficacia actual de la gestión de los riesgos mundiales y a reflexionar sobre qué partes interesadas están mejor situadas para gestionarlos eficazmente, con el fin de suscitar oportunidades de actuación y colaboración a escala mundial.
• Preguntas cualitativas sobre los riesgos: se basaron en los conocimientos de los expertos para identificar los riesgos nuevos y emergentes.

El informe complementa estos datos con los de la Encuesta de Opinión Ejecutiva (EOS) del Foro Económico Mundial, cuando se consideran en el contexto de la GRPS. Esto permite identificar los riesgos que suponen la amenaza más grave para cada país en los próximos dos años, pues da una visión de las preocupaciones y prioridades locales y señala posibles “puntos calientes” y manifestaciones regionales de los riesgos mundiales.

¿Cuáles son los resultados del Informe?

En el corto plazo, es decir, a dos años, los riesgos globales percibidos con mayor preocupación son el coste de la vida; los desastres naturales y los episodios de meteorología extrema; y la confrontación geoeconómica. Sin embargo, si ampliamos ese periodo a 10 años, los riesgos medioambientales cobran mayor relevancia.

Los dos únicos riesgos que no se repiten en estos dos listados son la crisis del coste de la vida, que se presenta como el problema principal a dos años, y es una clara muestra de las preocupaciones económicas actuales, pero que baja al puesto 15 en el listado a 10 años, y la pérdida de biodiversidad y el colapso de los ecosistemas, que preocupan más al largo plazo.

Bajo una óptica más cercana, el informe muestra que situaciones como la Guerra en Ucrania, la inflación generalizada, el coste de vida y los problemas con el suministro eléctrico marcan ya la agenda de 2023.

Algunas de las cuestiones remarcadas en el informe tienen que ver con cómo las crisis más recientes agravan las vulnerabilidades sociales. Señala que la disminución de las inversiones en desarrollo humano erosiona la resiliencia a largo plazo y que la tecnología puede aumentar las desigualdades sociales. También alerta, haciendo uso de diferentes tipos de gráficos, sobre los riesgos de las policrisis, es decir, crisis en simultáneas en diversos ámbitos.

En el informe puede encontrarse los resultados de los 5 riesgos más importantes por cada uno de los 121 países que incluidos en la investigación. En Iberoamérica, por poner un ejemplo, países como Colombia, Argentina, Brasil, España, Portugal y México muestran una gran preocupación por la inflación rápida y/o sostenida. Hay otras respuestas que se ajustan a la situación actual de los países de manera muy específica, por ejemplo, en Perú la mayor preocupación es el miedo a un colapso de Estado, que actualmente se ve reflejado en el reciente cambio de presidencia y en las manifestaciones que se reproducen por todo el país.

¿Qué podemos hacer para mitigar los riesgos?

Conocer y reconocer los riesgos identificados puede ayudarnos a tomar decisiones y acciones de forma proactiva desde una visión global, adaptable e innovadora. La respuesta a las crisis actuales y la mitigación hacia el futuro debe pasar por toda la sociedad, incluidas las empresas y los individuos.

Tres áreas en las que las empresas y organizaciones pueden incidir ampliamente son: la inversión en energía verde, clima y naturaleza, mejorar la salud y el bienestar de los trabajadores, e invertir para mantener la seguridad de los entornos digitales a los que estos están expuestos.